Las vitaminas del grupo B participan en la transformación de los azúcares en energía, ayudan al sistema nervioso, mejoran concentración y equilibrio y evitan alteraciones nerviosas. Se encuentran en los cereales, en la levadura de cerveza, hígado, pescado azul, lácteos, etc.
La vitamina C, ayuda al organismo a asimilar el hierro, la encontraremos en el kiwi, pimientos rojos, cítricos...
Algunos minerales importantes para subir el ánimo, son magnesio, calcio, hierro y zinc. El magnesio nos ayuda a controlar el estrés y el abatimiento, podemos obtenerlo de las pipas de girasol, la soja, las judías blancas, el chocolate amargo, el pan integral, etc.
El hierro está encargado de oxigenar tejidos y cerebro y nos ayuda a estar más enérgicos. Lo obtendremos de alimentos cómo el salvado/germen de trigo, hígado de ternera, almejas, almendras, ciruelas/uvas pasas, nueces de brasil, acelgas,...
El zinc nos ayuda a concentrarnos y por tanto es útil para el aprendizaje, se encuentra en el hígado de cerdo, langosta, piñón, harina de soja, centollo, ...
Consumiendo leche desnatada, legumbres o remolacha, favoreceremos la producción de hormonas contra el estrés y la apatía.
No tenemos las mismas necesidades según la hora, hasta las 14:00 horas, el cuerpo reclama proteínas para mantenernos alertas y estar activos. a partir de las 15:00 horas, alimentos ricos en glúcidos que nos frene poco a poco y nos induzca al sueño.
Siempre hay que reservar espacio para ensaladas y alimentos verdes, ácido fólico, necesario para renovar los glóbulos rojos.
Con el triptófano, aminoácido precursor de la serotonina, nos encontraremos mejor, aliviaremos la ansiedad y conciliaremos el sueño. Podemos encontrarlos de forma natural en lácteos, pescado azul, huevo, frutas, legumbres,...
Una alimentación equilibrada es el complemento perfecto para el ejercicio de esta temporada de otoño, y el ejercicio perfecto, es el que tú decidas practicar, pero con seso, si te atreves a realizarlo y a completarlo con estimulación de tu cerebro, ganarás en energía y en felicidad y esa es la pretensión por mayoría, ¿o no?